Mediante maceración tradicional, se ha logrado dotar a este vino de un cuerpo capaz de soportar su larga crianza en roble americano. Ha sido sometido a una crianza de seis meses en depósito, diez meses en barrica y otros tantos en botella en su periodo reductor.
Notas de cata
Color cereza intenso con ribetes teja, de capa alta. En boca, predominan las notas de fruta madura con las de crianza como tabaco y tostados. Su gran estructura y amplitud en la boca le convierten en un "vino de autor" muy singular. Los taninos van acompañados de notas que recuerdan la menta, el regaliz y la madera pero que no impiden la expresión de su exuberante carácter.